Rojas se había llevado de manera extraoficial las dos primeras etapas cronometradas donde hubo actividad el día de hoy, y al rodar ya en la tercera, Rojas fue a dar a una zanja debido a que la llanta trasera izquierda tenía una ponchadura, con lo cual desafortunadamente perdió el control del Studebaker. El auto no resultó tan dañado por ello pero al caer en la zanja, ésta impidió que pudieran salir y se quedaron atascados, con lo que se perdieron el resto de las etapas cronometradas del día de hoy.
El Studebaker fue ya removido del lugar y fue trasladado a Oaxaca donde será arreglado para el día de mañana volver a formar parte de la caravana, aunque ahora Rojas tendrá que afrontar el tráfico de los autos más lentos que tendrá por delante. Aunque por ahora el pensar en la victoria luce complicado, el tetracampeón de la Grand Am tratará de llevarse los mejores parciales de cada día.
Mañana la caravana sale de Oaxaca con rumbo al Distrito Federal, en donde se incluye una parada en Tehuacán donde se dará la clásica recepción de cada año a la Panamericana. Serán 562.450 kilómetros los que se recorran mañana con la llegada a la Avenida Juárez del DF, en donde estarán arribando aproximadamente a las 3 de la tarde. Aquí dormirán para partir el próximo domingo a las 7 de la mañana desde la Diana Cazadora, ubicada en el Paseo de la Reforma.
Memo Rojas, Studebaker 101 Telmex-Telcel-Red Bull-Office Depot:
"Estamos muy tristes, no esperábamos en absoluto una ponchadura en la competencia. Me da mucha tristeza que en el primer día perdamos todo este tiempo por este percance. El coche se despistó a consecuencia de ello pero el auto está bien. Sin embargo hemos perdido tiempo muy valioso que será muy difícil recuperar. No nos queda más que ir a buscar ganar días completos. Vamos a hacer todo lo posible para ello".